John Grinder, un linguísta y Richard Bandler, un matemático, psicoterapeuta y experto en computadoras, estudiaron los métodos de tres importantes psicoterapeutas que de manera consistente eran capaces de provocar notables cambios en el comportamiento humano.
Los métodos que Grinder y Bandler desarrollaron desde entonces (en la década de los setenta) se han aplicado en los campos del deporte, los negocios, el gobierno y el desarrollo personal.
El impacto de la Programación Neurolinguística ha sido transcendente pues sus aplicaciones se han extendido a más y más áreas de la vida humana. Sus conceptos sencillos pero profundos y los registros de seguimiento de éxitos prácticos han dado como resultado su notable crecimiento.
La Programación Neurolinguística cuenta con muchas técnicas para cambiar todo tipo de hábitos arraigados y alcanzar cualquier objetivo personal.
El nombre de Programación Neurolinguística surge de:
- Programación: se refiere a la forma que podemos programar nuestros propios pensamientos y comportamientos de manera muy similar al modo al que se programa un ordenador para que haga cosas específicas.
- Neuro: alude a los procesos neurológicos de ver, oír, sentir, gustar y oler, es decir, los sentidos que empleamos para procesos de pensamientos interiores a la vez que para experimentar el mundo exterior.
- Lingüística: reconoce la parte que desempeña el lenguaje tanto en nuestra comunicación con los otros como en el modo en que organizamos nuestros pensamientos.
En resumen, la Programación Neurolinguística trata de la manera en que filtramos a través de los cinco sentidos, nuestras experiencias del mundo exterior y de cómo usamos esos mismos sentidos exteriores intencionadamente y también sin saberlo, para conseguir los resultados deseados.
Todo tiene que ver con la forma en que percibimos o pensamos. Y son nuestros pensamientos, percepciones, imaginaciones, patrones de creencias los que determinan lo que hacemos y lo que conseguimos. Es por todo ello, que la Programación Neurolinguística se puede definir como “el arte y la ciencia de la excelencia personal”.
Maira Fuencisla Rodríguez
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