Usamos cookies para mejorar su navegación
OK. OK Más información |

¿Qué haríamos si volvieramos a nacer?

En ciertas oportunidades, cuando miramos hacia el pasado nos invade un sentimiento de tristeza ó culpabilidad por aquellas cosas que dejamos de hacer ó bien por aquellas que hicimos mal ó torpemente; sin embargo en el presente de nada nos sirven ni las lágrimas ni el malestar. Todo lo que podemos hacer es reflexionar sobre lo sucedido para extraer los aprendizajes que toda experiencia nos aporta. Después, hay que seguir adelante, más sabios, más serenos... En relación con esto E. Bombeck nos cuenta su experiencia:

Alguien me preguntó en estos días si, pudiendo volver a nacer, yo viviría de otro modo. De inmediato le respondí que no, pero luego lo pensé de nuevo y llegué a las siguientes conclusiónes:

Si pudiera revivir mi vida, hablaría menos y escucharía más. No renunciaría a invitar a cenar a mis amigos sólo porque el mantel tenga algunas manchas o porque la tapicería esté desteñida. Nunca pretendería, en un día soleado cerrar las ventanas de mi automóvil para no despeinarme. No dejaría que la vela, en forma de rosa, se estropeara olvidada en el candelabro; la gastaría a fuerza de encenderla. Me tendería en el prado con los niños sin pensar en las manchas de hierba en mi ropa. Lloraría y reiría menos ante la televisión para hacerlo observando más la vida. Me iría a la cama cuando estuviera enferma en vez de acudir con fiebre al trabajo, como si faltando, el mundo se detuviera. Amaría más  cada momento, consciente de que dentro de mí vive la única oportunidad de colaborar con Dios en la realización de un milagro”.

Hasta aquí los pensamientos de E. Bombeck. Lo importante, es que cada quien hagamos nuestra propia reflexión de manera que podamos enderezar algunas cosas para luego no tener que arrepentirnos de lo que pudimos hacer y no hicimos ó  de lo que no debimos hacer y sin embargo hicimos....


Mayra Fuencisla Rodríguez

Relacionados: 

 Inicio del Blog