¿Cómo se expresa la Naturaleza? ¿Cual es su idioma? ¿Cómo podemos aprenderlo, entenderlo y respetarlo? ¿Aprenderemos por experiencia o incurriremos una y otra vez en los mismos errores?
Un Lenguaje Común
La Naturaleza tiene un lenguaje propio, “sui generis” con el cual se comunica a todas las criaturas, ya sea que caminemos a cuatro patas o en dos, ya tengamos alas o no, ya seamos blancos, negros o amarillos, de uno u otro sexo En definitiva se comunica con todos por igual, y sin embargo, no llegamos a entenderla porque rara vez le prestamos atención…
La Tierra: un “Titanic” en peligro.
Respetar las leyes o cualidades de la Naturaleza nos augura una feliz permanencia en este planeta, sin embargo descuidarlas nos coloca en una situación de eminente peligro. Ecólogos, ambientalistas, biólogos, etc hace ya muchos años que encendieron sus alarmas:
Cuidado!! El orden se está alterando demasiado!! Podemos ocasionar grandes peligros irreversibles tanto para el Planeta como para nosotros mismos !!! S.O.S!! S.O.S!!
Y sin embargo, ¿quién escuchó? ¿Quien escucha? ¿No tiene todo esto demasiada semejanza con la tripulación y pasajeros del Titanic, distraídos unos y otros en múltiples banalidades? Advertidos del peligro no prestaron atención. Después, ya fué demasiado tarde...
Un alto en el camino
La actual pandemia, de manera inesperada nos ha hecho refugiarnos en nuestras viviendas por miedo al contagio. Y pese a todo el dolor y todas las contrariedades, nos está proporcionando un tiempo, una oportunidad de reflexionar sobre nuestra manera equivocada de vivir, sobre nuestro frenético consumismo, sobre la banalidad y precariedad de nuestras vidas. Y por sobre todo las cosas, de la ignorancia del orden natural.
Algunas opiniones en relación a la actual pandemia
De acuerdo al Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente el 60% de las enfermedades infecciosas humanas tiene origen animal, un porcentaje que alcanza el 75% en el caso de las enfermedades llamadas “emergentes” como el ébola, el VIH, las gripes aviarias, el SARS o el zika. “La emergencia de enfermedades zoonóticas está asociada con frecuencia a los cambios medioambientales”, consecuencia de “las actividades humanas, desde la modificación del uso del suelo hasta el cambio climático”
En opinión de Jane Goodall, primatóloga británica que ha dedicado su vida a la defensa de los animales, esta pandemia es el resultado de nuestra indiferencia hacia los animales. “Es nuestro desprecio por la naturaleza y nuestra falta de respeto por los animales, con quienes tendríamos que compartir el planeta, los que han causado esta pandemia, presagiada desde hace mucho tiempo”.
Por su parte, Gwenaël Vourc'h ha expresado lo siguiente: “Más allá de la respuesta indispensable a cada epidemia, hay que reflexionar en nuestro modelo” y sobre nuestra relación con los ecosistemas naturales y los servicios que nos proporcionan ”
En el mismo sentido Anne Larigauderie pide “un cambio transformador para encontrar una solución a esta tragedia mundial” para que los sectores económicos como las finanzas, la pesca, los transportes o la energía tomen en cuenta el medio ambiente.
Sin embargo, todavía estamos a tiempo...
Nosotros, a diferencia de los pasajeros y de la tripulación del Titanic aún estamos a tiempo para ocuparnos a consciencia de lo que nos está pasando y en consecuencia comenzar a adoptar una visión más realista sobre nosotros mismos y sobre el mundo irracional que hemos construido. Como ya sabemos, de sabios es rectificar… Y son muchos los cambios que hemos de hacer...
Y tú ¿qué opinas? Tus comentarios son importantes, participa!!
Maira Fuencisla Rodríguez
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